domingo, 22 de mayo de 2016

Para comenzar a instruir a los más pequeños,hay que empezar por los mayores, ¿o era al revés?


Comenzamos, en serio

No es que éste sea el manual atrevido de bibliotecas infantiles, es que va a ser lo más. En primer lugar he de decir que mis experiencias han sido tan reales como yo, por eso lo primero que aprendí, y enseño es a volar, !si señor!



En segundo lugar  mostraré cuál es el rostro real de los niños a los que debemos embaucar, dicho ésto en el buen sentido de la palabra, porque hay muy mala onda en la esfera equivocada.

Si señores, és lo que es...un ser vivo con rostro deformado por su creatividad, lo que lo hace perfecto para nuestro propósito. Que consiste en que sea una creatividad amiga aprendida a brisa de hojas de libro, claro.
y como es natural, cuento con muchísimos aliados. 
En la próxima entrega: El habitáculo ideal